A pesar de que Marco Fabián ha declarado en varias ocasiones que aprendió la lección de los errores que ha cometido durante su carrera como futbolista profesional, sigue sin entender. Un ejemplo claro de lo antes mencionado es la fiesta del fin de semana pasado.



Dicho evento le ocasionó una multa económica por parte de la Liga MX, además, fue separado 10 días del equipo de Bravos Juárez como parte del protocolo por el Cóvid-19.

Sus constantes indisciplinas lo alejan cada vez más del conjunto del Guadalajara, pues la directiva comandada por Amaury Vergara y Ricardo Peláez, saben que su regreso podría significar varios problemas extracancha, de modo que en estos momentos tiene cerradas las puertas de Verde Valle.



Marco Fabián fue considerado hace algunos años como una de las nuevas joyas del balompié mexicano; sin embargo, su problema con el alcohol impidió que sobresaliera más en este deporte.





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