Uno de los principales problemas del Guadalajara en el último Torneo Clausura fue la falta de gol de sus delanteros. A pesar de la gran campaña llegando a la final, puertas adentro de la Nación Rojiblanca saben que esa fue una cuenta pendiente, y que deberán mejorara si quieren volver a estar en una final el próximo semestre.



Es por eso que una noticia reciente cayó como un baldazo de agua fría en el Chiverío, pero al mismo tiempo hará que los directivos se vean obligados a sacar la billetera para ir por refuerzos de calidad en el centro del ataque. Ya no hay una opción, sino que son varios los que deben sumarse a la plantilla ante esta novedad que se acaba de conocer.



Es que Carlos Cisneros, uno de los extremos del equipo, recibió el parte médico sobre una lesión que lo tenía a maltraer. Lamentablemente para el jugador, la lesión en concreto es una rotura completa del ligamento cruzado anterior en su rodilla derecha, lo que le deparará una recuperación fuera de las canchas de entre 7 y 8 meses, es decir, recién podrá volver a jugar el próximo año.

Esto obliga a los directivos del Rebaño Sagrado a buscar más de un nombre de peso que aporte gol y rendimiento inmediato con la playera de Chivas. El principal objetivo era repatriar a Chicharito, pero ahora también se suma como prioridad la incorporación de Alan Pulido para tener más variantes en el frente de ataque.

Lo que deberá desembolsar Chivas para tener a ambos.
Teniendo en cuenta el valor de mercado tanto de Chicharito como de Pulido, la sumatoria de ambos fichajes tendría un valor total de alrededor de 7 millones de dólares sin contar el salario. Una cifra que no es tan elevada si consideramos la calidad de los jugadores que llegarían a la Nación Rojiblanca, ambos goleadores internacionales.





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