Todos los futbolistas tienen un equipo favorito, ese con el que desde pequeños sueñan con usar sus colores algún día, pero la realidad es que pocos son los que lo logran. Uno de ellos es Gilberto Sepúlveda, quien cada día trabaja más para conseguir su sueño porque el primero ya lo logró, porque está en Chivas por su familia.



El zaguero llegó al equipo en 2019 y desde ese momento ha hecho lo imposible para lucirse en el club donde siempre quiso estar. Además, su historia de superación es lo que lo llevó a nunca darse con vencido y a aprovechar cada oportunidad que se le ha presentado.



A pesar de que su familia no vivió en las mejores condiciones y tuvieron problemas económicos, ’Tiba’ siempre ha estado agradecido por el apoyo que le brindaron para consolidarse en el futbol mexicano y ahora se los retribuyó jugando para Chivas.

El padre del jugador rojiblanco trabaja como albañil en Sinaloa, pero eso no le ha impedido apoyar a sus hijos a alcanzar sus sueños de ser futbolistas. El hermano mayor de Gilberto fue el primero en llegar a Guadalajara, aunque el hecho de estar lejos de su familia le afectó mucho y decidió volver.

"Mi hermano tuvo la oportunidad de pertenecer a las fuerzas básicas de Chivas, esa es una gran motivación. Él se fue a los 12 años, bien chiquito y se regresó", comentó el ’Tiba’. Es por ello que ahora que es defensa titular en el equipo, una de sus metas es darle esa satisfacción a él y a su familia.

Todos tienen un motivo por el cual sacrifican horas de sueño y le dedican 24/7 al futbol y el hecho de que Gilberto Sepúlveda está en Chivas es por su familia, esa motivación que lo lleva a querer ser el mejor y ¿por qué no? emigrar a Europa algún día.





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